Toda la vida se ha dicho que el cliente manda. Y para corroborar que con la irrupción de la tecnología lo hace cada vez más aquí está la muestra. Se trata de la nueva aplicación E-Restaurante, que, menos meterse en los fogones, permite al usuario gestionarlo todo desde su propio móvil.
El funcionamiento es sencillo. El interesado hace la reserva a través de su teléfono y en ese mismo momento el restaurador recibe una notificación en su terminal. Además, el cliente puede realizar las peticiones que considere oportunas, como elegir la mesa que desea que se le guarde, el vino que quiere tomar durante la comida o que se le sirvan unas anchoas del Cantábrico de aperitivo, por ejemplo.
Una vez en la puerta del establecimiento elegido, se registra captando con su móvil el ‘código qr’ que aparece en el distintivo que lucirán todos los locales adheridos a esta campaña. En el restaurante se tendrá conocimiento de su llegada y será recibido de acuerdo a las pautas que él mismo marcó en la reserva.
Una vez sentado, el camarero ni siquiera tendrá que molestarse en acercarle la carta, pues el propio cliente podrá leerla en su teléfono y pedir su menú. Cuando acabe, tampoco tendrá que aguardar a que le traigan la cuenta, ya que mediante esta aplicación la podrá gestionar él mismo y, por supuesto, pagar la factura a través del teléfono. Todo ello se puede realizar igualmente sin necesidad de reservar.
El grueso de la información de lo que ha consumido ese día quedará registrado y podrá ser consultado posteriormente tanto por el usuario como por el restaurador, para facilitar posteriores visitas al local. «Esto nos permite crear y mantener una relación más estrecha con la clientela y aumentar la fidelización. Pero sobre todo mejorar la calidad del servicio», destaca Alejandro García, gerente de Casa Montaña, uno de los cuatro establecimientos de Valencia –junto a Palace Fesol, Vertical y Hesperia– que ya funcionan con esta dinámica.
Esta nueva aplicación es una apuesta del recién creado Clúster del Turismo de la Comunitat Valenciana. En él participan 140 empresas turísticas, más de 30 asociaciones empresariales y ocho centros de conocimiento, además de otros organismos institucionales.
«Las extremas condiciones económicas que atravesamos hacen necesaria esta colaboración público-privada para mejorar nuestra competitividad», ha destacado su presidente, Manuel Espinar.
Aunque de momento son pocos los restaurantes que han mostrado su interés, el objetivo más inmediato es integrar al más de centenar de establecimientos integrados en la red Saborea. «Es necesario romper ese miedo a la tecnología que existe dentro del sector, pero se trata de un proyecto de largo recorrido con un alto potencial».
Por el momento el acceso y utilización de E-Restaurante es completamente gratuito, aunque tampoco se descarta aplicar más adelante un coste por transacción.
