Por Manuel Duran
LOS VINOS ESPAÑOLES
Por Manuel Duran
Tenemos una excelente materia prima y un clima muy razonable para hacer buenos vinos originales, pero una mayoría de vinicultores españoles han preferido producirvinos parecidos a los franceses.
Sin duda es más fácil imitar que crear. Aparentemente es también más fácil vender vinos parecidos a los que se producen en Francia ya que sus variedades son muy conocidas, pero el problema es que de vinos afrancesados hay ya en exceso producidos en varias Denominaciones de Origen españolas, y además en Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Chile, Argentina,etc..Concretamente en Australia hay en este momento un excedente de cien millones de cajas. Que hacer vinos en España a base de chardonnay, cabernet, sauvignon, merlot, etc. no ha sido unabuena solución es más que evidente.Basta comparar nuestras exportaciones con las de Italia. Por otro lado el consumo interno ha bajadoa 17,3 litros per cápita y esto es menos que lo que consumen los británicos, un país que hasta hace pocos años no tenía tradición vinícola y menos aún producción propia.
Creo que sería hacer una encuestalo más amplia posible sobre si los sumilleres piensan que es preferible hacer vinos afrancesados que vinos con sabor al sitio de donde proceden, cosa que solo se consigue utilizando las variedades locales tradicionales.
Otra pregunta sería si están seguros que lasdetalladas descripciones sobre a que fruta se parece cada vino, son positivas o no. Recientemente pedí a una señora que leyese una de esas descripciones y después de la lecturaesta me preguntó si todos esos sabores a distintas frutas eran debidos a haber añadidoesencias al vino.
Creo que esto no nos puede sorprender y es muy negativo. El sabor de frutas en un vino puede dar a entender, también, que ese vino se destina a acompañar exclusivamente el postre. Hace ya bastantes años leí un artículo del experto Hugh Johnson, gran entusiasta de los vinos españoles hechos con variedades autóctonas, que decía que no le gustaba que su bebida favorita Los vinos españoles cayese en ridículo comparándola a una macedonio de frutas.
Que para él el vino no sabe a frutas si no a vino. Comparto plenamente esta opinión. Los que comparan el vino con las frutas no me consta que cuando toman fruta digan a que vino sabe. Confiemos que después de haceresta encuesta el tema seestudie a fondo. Creo que irán desapareciendo los vinos de imitación, disfrutaremos de más vinos originales, se procurará recuperar más variedades locales y dejaremos de perderel tiempo procurando encontrarles sabor a frutas.
Con esta “simplificación” seguramente se conseguirá atraer a la juventud, que actualmente consideran el vino demasiado “complicado” ¿Quién puede entender que un vino a base de chardonnay, por ejemplo, sea un vino español y característico de un montón de Denominaciones de Origen de toda España? A nadie se le ocurriría comprar aceite hecho en la región del Champagne
Manuel Duran