Los hosteleros, preocupados por fidelizar a los turistas La Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel) y la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT) han coincidido en puntualizar el «toque de atención» propinado por el presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, y la consejera regional de Empleo, Industria y Comercio, Margarita Ramos, al sector turístico con respecto al «récord» de turistas y su hasta ahora modesto reflejo en el número de empleos creados, al considerar que «se contrata el personal que se necesita».
«Los empresarios contratan cuando tienen necesidad de hacerlo, cuando pueden y es rentable», precisó el secretario de Ashotel, Juan Antonio Rosado, para quien «las administraciones públicas deben apoyar la promoción de Canarias como destino de calidad, que no se limita a los hoteles de cinco estrellas, sino a buscar clientes con poder adquisitivo y a poner precios rentables», aseguró.
En este sentido, consideró que la actual demanda turística que viaja a Canarias, condicionada por la situación de inestabilidad política y económica de países como Egipto, «habría que estabilizarla, no hacerla coyuntural, es decir, no estable y no permanente». En consecuencia, agregó, «no creo que el sector no haya contratado; otra cosa es que esa contratación no haya sido permanente», en cuyo caso «se contrata en función de las necesidades, no de los deseos de Rivero», aseveró Rosado.
En este mismo sentido, el presidente de la FEHT, Fernando Fraile, «comprendió» que Rivero «pueda sentirse defraudado e inquieto», o que sus palabras al sector hayan sido fruto de una «decepción» por «la lentitud» con la que el sector crea puestos de trabajo, pero también le pidió «paciencia», puesto que «los turistas están haciendo un esfuerzo por venir, gastan menos» y la contratación «no solo está relacionada con la ocupación», expresó.
Fraile reiteró que los empresarios «contratan el personal que necesitan» en función de factores como el gasto que hacen los visitantes, por lo que «se da el servicio acorde a los precios que se pagan»; las «camas ilegales» ocupadas que no se contabilizan y el cierre de complejos turísticos en Canarias. «Solo en Gran Canaria se han perdido 37.000 camas turísticas y, por tanto, también mucha mano de obra».
Fraile recordó que los establecimientos ya tienen sus «plantillas creadas» y que a partir de una cierta ocupación, en torno al 80%, emplean personal extra. (Fuente: Abc)
