Rugantino ha sido un histórico de los restaurantes italianos en Madrid, ya que abrió sus puertas hace 39 años, y diez después Grupo Vips amplió su oferta con otro italiano: Paparazzi.
Ambos restaurantes formaban parte, junto con los también dedicados a la gastronomía italiana Lucca y Tataglia, que siguen abiertos, de los conceptos singulares que opera el grupo.
La cocina italiana también ha perdido otra oferta gastronómica en Madrid con el cierre de los dos restaurantes de la marca Trattoria DG, del empresario Andrea Tubarrello, que ha dado por finalizada la continuidad de este concepto.
Según fuentes de la asociación madrileña de restauración La Viña, no es que se haya producido un desgaste de conceptos gastronómicos concretos, sino que la crisis ha afectado sobre todo a los establecimientos de gama media alta y alta.
Los consumidores han reducido sus salidas a comer fuera de casa, al tiempo que han sustituido los restaurantes de ticket medio alto por otros con un precio más asequible.
Por otro lado, Grupo Vips acaba de firmar un convenio de colaboración con el Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (Imidra) con el objetivo de promocionar los alimentos de la Comunidad de Madrid en sus restaurantes.
Grupo Vips es la primera empresa del sector hostelero que está participando en esta iniciativa desarrollada junto a la Comunidad de Madrid.
En una primera etapa, el proyecto se va a llevar a cabo en los restaurantes de alta gama de la compañía (Iroco, Teatriz, Bice, Tattaglia, Lucca, Manzoni y El Bodegón).
Se trata de una importante apuesta del grupo, empresa de origen madrileño, para potenciar los productos tradicionales y de calidad de la Comunidad de Madrid y ofrecer una oferta gastronómica sana y nutricionalmente completa.( Fuente : infohoreco)