Existen más de 300 variedades de naranja en todo el mundo. En invierno, este cítrico se convierte en el protagonista, aunque sus múltiples variedades permiten que prácticamente todo el año sea posible consumirlo, ya que según la tipología, el período de recolección va desde octubre hasta primavera y verano.
Por lo tanto, cada estación es óptima para unas variedades concretas de naranja, todas ellas con características, sabores y olores distintos. Según los expertos en la producción de este cítrico, es importante distinguirlas correctamente para consumirlas de la forma que mejor permita percibir sus cualidades.
De entre los cientos de variedades, cabe destacar algunas de las más importantes para el consumo, desde las que se recolectan al principio del invierno hasta las más tardías, que pueden recogerse hasta mediados de verano:
Navelina: Una variedad para tomar en fresco
Es una de las variedades de naranja más productivas y más cultivadas, con un sabor especialmente dulce, por lo que resulta idónea para tomar en fresco, como postre. Su recolección empieza en octubre y se prolonga hasta mediados de febrero y es la variedad más resistente al frío.
El tamaño de estas naranjas es medio, ligeramente ovalado o redondo. La pulpa es muy jugosa, sin semillas, de sabor dulce, y la piel de un naranja intenso cuando está madura, con un ombligo poco prominente.
Valencia Late: La mejor para la producción de zumos de naranja dulce
Es la variedad más importante del mundo y se cultiva en muchos lugares. Por su abundante jugo y su sabor y color intensos, produce zumos de muy alta calidad.
Como su nombre indica (late significa "tarde" en inglés), es una de las naranjas que maduran más tarde, entre marzo y julio. Es una variedad de naranja dulce y se empezó a difundir en España en la primera mitad del siglo XX. Desde finales de los setenta, es la variedad tardía de naranja más cultivada en nuestro país.
Su fruto es de color naranja, de forma ligeramente alargada a esférica, más o menos achatada, de tamaño medio a grande, con una piel fina, lisa y consistente, a veces un poco granulosa. La pulpa presenta un buen color naranja y un abundante contenido en zumo, de aroma excelente. El sabor es dulce, carente de semillas, apto para la elaboración de zumos.
Sevilla Amarga: La reina de las mermeladas
Esta variedad de naranja amarga se cultiva en España y se usa principalmente para la fabricación de mermelada. Su existencia se conoce desde hace siglos y fueron los califas de Córdoba los que le confirieron el carácter de árbol ornamental en toda Andalucía.
La variedad es popularmente conocida como Sevilla Amarga o Málaga Amarga y presenta un fruto de tamaño medio a grande, esférico, en ocasiones algo achatado y deprimido en los extremos. Su pulpa es jugosa y presenta muchas semillas. La piel es rugosa, gruesa y de textura irregular. Cuando está madura tiene un color anaranjado intenso.
La Sevilla Amarga se recolecta durante los meses de enero y febrero en Sevilla y Málaga. Por su amargor y acidez no se consume en fresco, sino que se destina especialmente para mermeladas.
Natal: Para zumos con un toque ligeramente ácido
Sus características son similares a la Valencia Late, aunque ligeramente más ácida.
Es una variedad originaria de Brasil que se cultiva casi exclusivamente en este país y supone una variedad muy importante para la elaboración de zumos. En Brasil se recolecta habitualmente por Navidad.
Presenta un fruto con pocas semillas, piel delgada y pulpa tierna y jugosa. El fruto es de gran calidad y a veces puede presentar una piel algo verde aun en su madurez.
Además, tiene unas condiciones ideales para la conservación y el transporte. Su fruto puede mantenerse varios meses en el árbol manteniendo todas sus cualidades.
Una "manzana de oro" con más de 20 millones de años de historia
Originarias del sudeste asiático y descendientes de la familia de las rutáceas, las naranjas tienen una larga historia. Actualmente, el consumo de estas "manzanas de oro", como eran conocidas en la mitología griega, se ha popularizado en todo el mundo, mayoritariamente en su versión zumo o fruta. Países como España o Brasil encabezan la producción de naranjas de alta calidad. Actualmente, se producen más de 30 millones de toneladas.
Es el cítrico más consumido y, nutricionalmente, supone un importante aporte de vitamina C. Además, contiene cerca de 170 tipos de fotoquímicos y 60 flavonoides, elementos beneficiosos para el organismo.