Tradición y vanguardia, la elegancia como seña de identidad
Chicote Catering se ha presentado en sociedad. Más de 150 invitados llenaron el clásico Museo Chicote en la Gran Vía madrileña, con motivo de la cena de degustación de su nueva línea Chicote Catering. Entre otras personalidades, la velada contó con la presencia de Tomás Gutiérrez, propietario de Museo Chicote; Pedro Serrano, Jefe de Relaciones Públicas; Javier Vázquez, responsable de Chicote Catering; y Miguel Garrido, Director General de la Cámara de Comercio de Madrid. Su menú Máxime causó una grata impresión entre todos los asistentes, como fiel reflejo del servicio de alta gastronomía que Chicote Catering puede llevar a cualquier evento en cualquier lugar.
Sushi, crema de galeras al perfume de estragón, piruletas de salmón con polvo de pistacho, rissoto de boletus, brandada de bacalao en cornete de tinta de calamar, tostas de cochinillo confitado con salsa de tomate y bombón de foie con peta zeta de chocolate, se alternaron con delicias tradicionales como el pulpo a feira, las cazuelitas de pisto y el queso manchego. Aunque la mayor sorpresa llegó al final con la pomada de gin tonic. Mundialmente famosa por su gama de cocktelería durante más de setenta años de historia, la distinguida marca Chicote se extiende al catering a través de un servicio caracterizado por su misma calidad y sofisticación. En palabras de Javier Vázquez, “calidad del producto, tradición y guiños a la cocina vanguardista” definen el estilo de Chicote Catering. Al igual que Museo Chicote, la elegancia es su seña de identidad.